El Banco de Alimentos de Quito: 18 años de misión por la población vulnerable
El Banco de Alimentos de Quito (BAQ) se creó en el 2003, por iniciativa de profesores y personal de la Escuela Politécnica Nacional. La finalidad siempre fue clara: evitar el desperdicio de alimentos y brindar soluciones integrales para combatir el hambre en Quito.
Nació por la urgente necesidad de aprovechar mejor los recursos alimentarios, ya que en Quito se desperdician diariamente más de 400 toneladas de alimentos aptos para el consumo humano; mientras que, en contraste con este desperdicio, el 42 % de los ecuatorianos no tienen la seguridad de obtener su sustento diario.
Gracias a la colaboración decidida y constante de empresarios, comerciantes, profesionales y miembros de la comunidad que actúan como voluntarios, el BAQ cumple con su objetivo de evitar el desperdicio de alimentos y genera acciones concretas que permitan combatir el hambre en la capital ecuatoriana.
Esta organización no gubernamental sin fines de lucro, cumplió 18 años sirviendo a la sociedad de Quito. Es una institución de ayuda social, sin fines de lucro, que se encarga de evitar el desperdicio de alimentos, gracias a acciones concretas que permitan combatir el hambre en la ciudad.
El BAQ, con la ayuda de voluntarios, acopia y selecciona alimentos recibidos en donación, que están en óptimas condiciones, pero que han llegado al final del ciclo de comercialización y por eso generalmente se desperdician. Todo el alimento recuperado se distribuye mensualmente entre más de 30.000 personas que pertenecen a los sectores más vulnerables de la capital. Hasta ahora ha distribuido más 9 millones de raciones de alimento.
Este centro opera en el sur de la urbe, en las instalaciones de la Metalmecánica San Bartolo. En 2019 amplió sus dimensiones de infraestructura a 1.000 m2, lo que ha permitido una mejor atención a las familias vulnerables, que son las beneficiarias.
La vinculación entre la EPN y el BAQ promueve la participación de profesores y estudiantes que aportan directamente con sus conocimientos, experiencia y compromiso a la solución de un grave problema social, como es el hambre, frente al excesivo desperdicio de alimentos.
Esta vinculación, por otro lado, aporta al cumpliendo de la misión de la EPN de formar académicos y profesionales en ingeniería y ciencias, con conciencia ética, solidarios, críticos, capaces de contribuir al bienestar de la comunidad; así como de generar, difundir y transmitir el conocimiento científico y tecnológico, con responsabilidad social.
El apoyo técnico constante de la EPN se ha dado a través de estudiantes que realizan prácticas pre-profesionales y proyectos de titulación (bajo la supervisión de profesores), que permitan realizar actividades como: procesar alimentos para incrementar su recuperación; además, de mantener los equipos operativos, crear bases de datos y procesar información, entre otras acciones.
El apoyo técnico directo de carreras como Ingeniería Química, Ingeniería Agroindustrial, Ingeniería Ambiental, Ingeniería Mecánica, Ingeniería en Sistemas, Ciencias Económicas y Financieras han fortalecido la gestión del BAQ y a la vez contribuyen a la formación profesional y humana de los estudiantes.
Es importante considerar además que entre los objetivos mundiales de desarrollo sostenible (ODS), el ODS 2 predica la meta de “Hambre cero” y el ODS 12 la de “Producción y consumo responsables”. A través de la vinculación de la EPN y el BAQ se apoya directamente al cumplimiento de estos objetivos.
Este esfuerzo ha sido reconocido con diferentes premios internacionales, uno de ellos fue en el año 2021 y es el que distingue Global Food Banking, una organización mundial que busca aliviar el hambre global. En el 2018, la Federación Global de Consejos de Competitividad, en el marco del evento Habitat III + 2 organizado por el Municipio de Quito también galardonó al BAQ.
Un acto destacable del BAQ es que fue uno de los pocos bancos de alimento que no detuvieron su servicio a la comunidad durante la pandemia causada por la COVID-19; es más, se fortalecieron gracias a la entrega constante de sus voluntarios y personal.
La Dra. Alicia Guevara, docente de la EPN y fundadora del BAQ, ha expresado su agradecimiento al decidido apoyo que ha recibido a lo largo de estos 18 años de las autoridades de la EPN que es la institución copartícipe del proyecto; además, de los docentes y estudiantes voluntarios, del personal que brinda su ayuda económica para comprar alimentos. La titular de este proyecto dijo que “Seguiremos trabajando para lograr un futuro sin hambre en nuestro país, se trata de seguir trabajando con la ilusión del primer día, haciendo lo más y lo mejor posible. Solo pido a la sociedad que mientras sigamos siendo necesarios, sigan apoyando esta tarea”, finalizó.
Cronología de logros BAQ en 18 años:
- El 12 de abril del 2003, profesores de la EPN y voluntarios realizan la primera recuperación de alimentos en el Ecuador y nace el Banco de Alimentos de Quito.
- El 19 de febrero 2004, el BAQ obtiene la personería jurídica del Ministerio de Inclusión Económica y Social como Fundación de Ayuda Social banco de Alimentos de Quito.
- En julio 2005 se firma el convenio Macro de Cooperación entre la EPN y el BAQ.
- Desde el 2006 recibe el apoyo de la Cooperación Técnica Belga para la ejecución de proyectos para recuperar alimentos.
- En el 2009 recibe el apoyo de la Cooperación Italiana para la ejecución de proyectos para recuperar alimentos.
- En el 2016 recibe el apoyo de Fundación Repsol para la ejecución de proyectos de recuperación de alimentos
- En julio 2018 el BAQ forma parte de Pacto Agroalimentario de Quito.
- En agosto 2018 el BAQ recibe el reconocimiento de Global Federation of Competitiveness Councils GFCC por el nivel de escalado que ha tenido en los últimos años.
- En octubre 2019 recibe el Reconocimiento de la Organización Resurgere por las actividades de atención a población vulnerable.
- En diciembre 2019 recibe el primer lugar del Reconocimiento Quito Sostenible y Responsable, del Consejo Metropolitano de Responsabilidad Social del MDMQ.
- En octubre 2020 recibe el primer lugar del Reconocimiento a las Buenas Prácticas e Desarrollo Sostenible (ODS2), de Pacto Global.
Datos de interés en 18 años:
- 2’546.895,60 kilos entregados
- 250 organizaciones sociales atendidas
- 6’598.175,13 platos de comida entregados
- 1’018.758 personas beneficiada